Una revisión auditiva permite evaluar la capacidad de audición de una persona en tan sólo unos minutos. Se trata de un estudio sencillo llamado Audiometría, que no causa ninguna molestia al paciente y se lleva a cabo por un especialista en Audición.
Los expertos recomiendan realizar una revisión auditiva cada año aunque no detectemos problema alguno y mantener especial cuidado a partir de los 50 años. Cualquier signo de pérdida por pequeño sea, detectado a tiempo puede ayudarnos a evitar, o al menos a frenar el deterioro de nuestra capacidad auditiva.
En México, más del 70% de la población nunca se ha sometido a una revisión auditiva, a pesar de que los adultos mayores son los que sufren más de la pérdida de audición, a esto se le conoce como presbiacusia,(pérdida de Audición por el paso del tiempo). En nuestro país se cree que el 8% de la población padece algún tipo de pérdida de la Audición.
La revisión Auditiva mejor conocida como Audiometría, consiste en una pequeña entrevista para saber el historial auditivo del paciente, una videotoscopía para descartar cualquier patología del oído externo y así corroborar que los resultados de la audiometría son fidedignos; después una audiometría tonal aérea para determinar el umbral de audición del paciente y una audiometría tonal vía ósea que permite medir la capacidad de audición del oído interno. Posteriormente se realiza una logoaudiometría para evaluar la inteligibilidad, Por último una prueba del umbral de inconfort.
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